sábado, 23 de mayo de 2009

Según un nuevo estudio de Harvard los heavys son más fieles en sus relaciones amorosas.

Manowar en Harvard con George Pititis

Lo han dicho muchas veces los antropólogos y los sociólogos. Quien ahora ratifica los efectos beneficiosos que puede tener el metal sobre el control de determinados sentimientos es un estudio realizado por el equipo de Investigadores de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Harvard que, tras la primera fase de experimentación, concluye que la audición de hevy metal de animales a través de ipods nanos, concretamente de Iron Maiden y de Barón Rojo, clásicos del hevy metal internacional, "previene el adulterio y las ganas de cópula con la mujer del prójimo".

El estudio va incluso más allá y señala que cuando los animales adúlteros recibieron la administración de un concentrado de CD’s de metal "experimentaron una menor ansia", lo que supone que se le atribuye "un carácter paliativo".

La investigación, de carácter pionero y dirigida por el catedrático de Bioquímica y Biología Molecular,George Pititis, forma parte de un proyecto que analiza "La importancia del consumo moderado de música de mínima calidad en la prevención del desgaste muscular asociado al bajo-vientre".

Según explicaron fuentes del grupo Slipknot, el director de la investigación se dirigió a ellos hace un año para pedir su colaboración, que no ha sido otra que ofrecer una muestra de sus mejores rifts. El objetivo era entonces evaluar "los niveles de reverberación y demás componentes beneficiosos en el heavy, y la observación de su potencial amoroso".

El informe realizado por Pititis señala que la administración de Heavy Metal vía auricular a animales de laboratorio a los que se provocaron trampas con ratas fulanas de manera intencionada para que fueran infieles, ha funcionado e incluso a provocado algún vómito ante el estímulo de las ratas fulanas.
Cuando el animal tratado experimenta el estímulo de otro animal pecador y los cuerpos cavernosos se llenan de sangre y aumenta sensiblemente el tamaño y la turgencia del pene, un simple arpegio de Yngwie J Malmsteen crea un efecto evacuador que hace que el animal se corra antes incluso del primer contacto. En lugar de hincharse y reventar, los cuerpos cavernosos se encogen y se fragmentan, de manera que pueden ser fagocitadas y sus componentes reutilizados por células de tejido adyacente.

De momento, los resultados de la investigación sólo se pueden asociar a los animales a los que se ha provocado sexualmente de manera intencionada. Sería prematuro poder decir que el efecto del Heavy Metal en humanos es igual.

Fuentes de Harvard reconocieron que en el estudio han intervenido también otros géneros como el doo woop y el hard Rock, aunque los resultados con auténtico Heavy Metal han sido muy superiores.
Harvard, añadieron las mismas fuentes, cuenta con resultados de otros laboratorios que avalan el "alto contenido de fidelidad de lo heavys", algunos de los cuales disminuyen su concentración durante el envejecimiento.

Hay que tener en cuenta también, que los heavys son los que nunca perdonan una infidelidad.

1 comentario:

Trepilator dijo...

Manowar = Relación estable y duradera.

Bertín Osborne = Despertarse por la mañana y ¡¡¡huir!!!

Siento ser escueto, pero como jervi soy fiel a la hora de terminar el turno de trabajo.

Pititis, concubino del Infierno... sin pelo... sin uñas... ¡¡¡yo te invoco!!!