jueves, 28 de mayo de 2009

Más largo, más aceite, sin cortes.



Muchos soys los seguidores de Croqui que me parábais por la calle pidiendo nuevos capítulos, y yo, sólo en la oscuridad lloraba y me arrancaba los cabellos sabiendo que ya no poseo los derechos de mi más admirable creación.
Los estudios Hollywodienses han hecho esperar al público para crear este engendro que hoy se presenta. Más dinero, más medios, más efectos, pero vacío de contenido.
Desde mi palacete de Cadaqués lloro desconsolado al ver que mis personajes han pasado a formar parte del star system.
Espero que no me reprochéis nada.
Siempre vuestro, Pomipilio

3 comentarios:

Dani Alarcón dijo...

Jajaja! Que bueno Sr. Pompilio! Si no fuese porque ayer tarde quedé con Quentin Tarantino, para hablar de nuestras cosas mientras degustabamos sendos capuccinos, y no me comentó nada de Croqui, diría que esta bella obra de corte asiático ha salido directamente de su cabeza. Gran trabajo el de la voz en off,,, que risas al imaginarle a usted emitiendo esa serie de espeluznantes sonidos,,,

Y, anisakis,,,jajaja,,,brutal

Menigue dijo...

Felicidades.
Como siempre nunca nos defraudan las nuevas entregas de Mr Croqui. Esto huele ya a superproducción.

Tendrán que disculparme por no dar señales de vida pero entre la operación del tabique nasal,la boda de mi hermano y que empezamos en el curro con el horario de verano, he estao matao.

Mu buen trabajo.A ver cuando una entrega conjunta con el Sr Maese, sería interesante. No sé, Mr Croqui eruptando sobre una niña oscura o algo así..je,je

Un saludo

ChutuluAlAjillo dijo...

Aunque ya le comentara de viva voz lo mucho que me gustó, observo anonadado como mi comentario virtual no se registró en su mesiánica bitácora.

Más provocativa que la nueva de Lars Von trier, le auguro más éxito que al hijo ilegítimo de Steven Spielberg y Qwerty Tarantino.

Gran esfuerzo por parte de ILM que han han superado cualquier producción anterior en lo que a efectos especiales, sin olvidar, una impresionante y emotiva actuación por parte de los actores.

Usted, Sr. Pompilio Filardi, mantiene viva la eterna llama del cine con sus apasionados alegatos.

Menigue... ¿tabique nasal? ¿No abrá caido en el infierno de la droga? Desde una islita casi paradisíaca le deseo que se recupere prontamente.